17 de septiembre de 2011

Reflexiones de un mago.


Tadelion Ojosdeán paseaba por los límites del bosque para despejar su mente de tanto trabajo acumulado. Llevaba varias semanas estudiando lo mismo y aun no había encontrado respuesta alguna a sus preguntas. ¿Qué pasa con la energía de An cuando un ser vivo muere? ¿A dónde se dirige, o en qué se convierte? ¿Significa esto que la esencia de nuestra vida nunca se desvanece y por tanto queda algo de nosotros en el universo? ¿Que en nuestra energía interior llevamos generaciones y generaciones de ancestros?

— Demasiadas preguntas y pocas respuesta nos dejaron los anteriores maestros magos como herencia, viejo amigo.— le susurró Ojosdeán a Guarig, su búho.

Ambos se alejaron siguiendo el perfil del bosque mientras el sol bajaba por el horizonte encrespado de las montañas de Lyorth. 


Camino hacia Tyran en la cordillera de Lyrioth durante la estación de Uruth.

1 comentario:

Miguel Ucendo dijo...

I like it! ;) ya me hago una idea, mañana recuerdame que te haga una :P